20 enero, 2006

Tipo de cambio y productividad.

Clasif. A

En una
entrada anterior se comentó la relación entre la inflación y el tipo de cambio, en esta ocasión se hablará de otro de los determinantes del tipo de cambio: la productividad. El objetivo es estar en condiciones para discutir en una entrada posterior cuál es el nivel correcto del tipo de cambio.

Las naciones más productivas tienen una ventaja al enfrentarse al comercio internacional y las menos productivas se ven obligadas a devaluar su tipo de cambio para no enfrentar un deterioro constante en sus cuentas con el exterior. Espero que un ejemplo sirva para que el lector comprenda la relación entre tipo de cambio y productividad.

Supóngase que en Estados Unidos cuesta 10 dólares hacer una silla y que en México cuesta 100 pesos; además, el tipo de cambio es de 10 pesos por dólar. También se supone que los productores norteamericanos venden sus lillas a 11 dólares para ganar uno y los mexicanos las venden a 110 pesos para ganar diez pesos.

¿Qué sucede si la productividad en México no cambia pero en Estados Unidos mejora y ahora los norteamericanos pueden producir las sillas a un costo de 9 dólares? El resultado sería que los productores de Estados Unidos pueden bajar el precio de sus sillas a 10 dólares y seguir ganando un dólar por cada silla.

Si los estadounidenses exportan las sillas a México pueden venderlas a 100 pesos (10 dólares de cada silla por el tipo de cambio de 10). El incremento en la productividad de Estados Unidos le da a sus productores una ventaja con respecto a los mexicanos que tienen que vender sus sillas 10 pesos más caras o sacrificar sus 10 pesos de ganancia.

Una devaluación del peso que lleve al tipo de cambio a 11 pesos por dólar permitiría a los productores mexicanos competir con las sillas norteamericanas que ahora costarían 110 pesos (10 dólares que cuestan las sillas en EU por 11 que es el valor del tipo de cambio).

Podría parecer que es lo mismo ser más productivo que devaluar el tipo de cambio y por eso se escuchan en los medios de comunicación frases como "devaluación competitiva" o propuestas de devaluación por parte de asociaciones empresariales e industriales argumentando que mejoraría la competitividad de los productores nacionales. Este es un error, la devaluación tiene algunas consecuencias negativas que es necesario mencionar.

Cuando la moneda de un país se devalúa sus habitantes pueden comprar menos bienes y servicios, es como si les redujeran su salario. Siguiendo el ejemplo anterior, una persona que ganara 200 pesos podía comprar dos sillas importadas antes de la devaluación pero sólo una después.

Una mayor productividad no solo se refleja en costos menores, también puede ser que los costos crezcan a un ritmo menor que el de los demás países o que se produzcan bienes de mayor calidad al mismo costo. El resultado final será el mismo sin importar cómo se manifiesten los incrementos en productividad.

Un país poco competitivo deberá devaluar su moneda para que sus exportaciones no desaparezcan y para que sus importaciones no aumenten demasiado pero esto deja a sus habitantes en una situación desfavorable.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy buen post, estoy casi 100% de acuerdo contigo :)

Anónimo dijo...

Interesante post, estoy de acuerdo contigo aunque no al 100%:)